Del pensamiento suprasensible, al pensamiento aristotélico.

 




Comúnmente encontramos la sensibilidad como una relación intima entre nosotros, como seres físicos y pertenecientes a la naturaleza en si, pero después del sedentarismo la sensibilidad tomo un papel fundamental en la capacidad que puede verse como una acción, o una vinculación del hombre y su epistemología, claramente el hombre arcaico a priori permanecía dentro de los limites dimensionales en su conocimiento limitado, nuestros antepasados posicionaban las costumbre del mundo antiguo con la sensibilidad del alma, la sensibilidad que presentaba como una coacción propia del sentimiento común, solo se manifestaba mediante interpretaciones del cuerpo, cosa que alimentaba a posteriori la construcción emocional del hombre antiguo, no podemos definir con claridad la pureza de la sensibilidad, sino por medio de vinculaciones sentimentales que profetizan una comunicación individual de cada ser humano.




Desde esa visión el hombre arcaico ha explorado cualquier tipo de sensación, sea interna o externa; pues no hay duda de ello que tras el paso  del tiempo ambas relaciones se unieron para crear una mejor cosmovisión, la de la duda, la duda vista como una interrogativa filosófica, ha sembrado la curiosidad intuitiva, que permita, o no crear un pensamiento propio, y de ese pensamiento desarrollar cuestionamientos metafísicos que pone en duda la la existencia misa del hombre, visto así el hombre pone una búsqueda experimentada a priori de las incógnitas existenciales, negando así el culto a lo esotérico y a lo místico, propiamente dicho de esa manera la filosofía nace para buscar una respuesta a todas las interrogativas, y crear una condición en la que el alma sienta una conexión propia con la realidad, la realidad es todo lo que conocemos como un todo, y conlleva a crear respuesta, y acciones que ayuden a revelar dicho pensamiento categórico, véase divulgar el pensamiento filosófico, la idea del filosofo como un divulgador de esos problemas que cotizan al hombre para poder llevar lo a un rumbo, o orientar sus propios principios, a lo que se define como rebuscar el sendero ontológico de su ser.



El Pensamiento aristotelico se resume como una voluntad del pensamiento, un pensamiento libre de todo misticismo conceptual que suprime  las características  más elementales, esas características pueden variar dependiendo del concepto abstracto del sujeto como entidad única, propuesto así el pensamiento después de la prehistoria la idea del hombre era una idea progresiva basada en juicios meramente intuitivos, es por es que cuando entendemos por pensamiento aristotélico, hablamos de las propias categorías fundamentas, y conceptuales que determinan una vía para la búsqueda del pensamiento juicioso, y crítico que se puede desarrollar en la prehistoria, pues gracias al desarrollo de la duda o del sentimiento  que conllevo a crear esa duda, claramente cuando hablamos del pensamiento aristotélicos como tal, no podemos decir o mencionar ciertas características ilimitadas que puedan tener este pensamiento, todo pensamiento es un efecto directo del consciente humano. 


Por lo tanto las transformaciones de estos conceptos lo podemos definir como, una descomposción de la ideas fantasiosas del pensamiento místico, que comprende al ser, y a su alrededor como una sola unión de idea, y del ser en sí, ya que el pensamiento aristotélico véase a posteriori, una selección de ideas o categorías transformadas para dar una importancia al ser filosófico del hombre común.